miércoles, 19 de mayo de 2010

EL QUE DÁ PAN AL PERRO AJENO PIERDE EL PAN Y PIERDE EL PERRO

BUENOS DIAS VERACRUZ
19 de mayo de 2010
Por: David Varona Fuentes

El turco Yunes, al borde de la locura.
Se ha peleado con todos en el PAN de Veracruz, y a todos ha corrido, despedido, amenazado, exhibido y ridiculizado.
Su última víctima: El Pipo Alejandro Vázquez Cuevas.
Quienes en el PAN veracruzano no conocían la soberbia ni el doble discurso y personalidad del abanderado a la gubernatura, están espantados, y no tardan en salir huyendo del equipo de campaña, como ya lo han hecho otros.
Antes que los alcance el látigo yunista, pondrán tierra de por medio.
Señores del PAN, no se ahoguen en un vaso de agua, ese Yunes que apenas están conociendo, es el mismo de siempre.
Es el mismo bravucón, arrogante e insensible, que conozco desde hace más de 30 años.
En nada ha cambiado, aunque él haya jurado que ha modificado su irritable y pendenciero carácter.
Al contrario, hoy luciendo la vestimenta de candidato a gobernador que siempre soñó portar, aunque no sea la del partido de sus amores, el PRI, se observa más endiosado e intransigente que nunca.
Y no es para menos.
No siente lo duro, sino lo tupido.
Su candidatura no crece, se encuentra paralizada.
Lentamente se extinguen sus sueños de ser gobernador.
Sus anhelos de triunfo electoral están prendidos de alfileres.
Sinceramente, como candidato, nadie desearía estar en los zapatos del ex director, con licencia, del ISSSTE.
Porque cuentan en el PAN, que Miguel vive momentos de pesadilla que jamás imaginó tener como aspirante a la gubernatura de Veracruz.
Ilusamente Yunes creyó que como abanderado de Acción Nacional al gobierno estatal, todo sería miel sobre hojuelas.
Hoy la bebe o la derrama.
Llama la atención que el político de Soledad de Doblado, busque culpables ajenos de sus tropiezos como candidato azul a la gubernatura.
A escasos días de iniciada su campaña oficial de proselitismo, no busca quien se la hizo, sino quien se la pague.
Pero Yunes se equivoca.
Si existe un responsable de su mediocridad proselitista y de acercamiento con la sociedad y los sectores productivos veracruzanos, ese es el propio Yunes.
El incontrolable temperamento del impuesto candidato, está calando muy hondo en la familia blanquiazul que le abrió las puertas en Veracruz, y finalmente podría ser su cruz política en la jornada electoral del 4 de Julio.
La salida vergonzante de Víctor Alejandro Vázquez Cuevas como coordinador de campaña, abre otro hueco profundo en el PAN.
El Pipo fue de los fanáticos más recalcitrantes de Yunes Linares; lo veía como su héroe valiente; era su Juan Sin Miedo Veracruzano, por su campaña de 2004 contra la corrupción alemanista.
Desde el proceso electoral 2004 al fracasar Butranza, para el entonces dirigente del CDE del PAN, no hubo otro candidato para el 2010 que Miguel; incluso el Pipo lo presentó con la crema y nata del panismo nacional, hasta con Calderón y Diego Fernández de Cevallos, aún cuando éste último no lo bajaba de represor.
Hoy, en pago, Vázquez Cuevas recibe de su ídolo Yunes, una patada por el trasero.
Pero tampoco se espanten señores panistas…
Ser malagradecido, es otra vieja virtud de Yunes.
Es indudable que el Partido blanquiazul se encuentra hundido en la peor crisis política de toda su historia en la entidad veracruzana.
Y todo, provocada por un solo personaje.
Miguel Ángel Yunes Linares, además de candidato a gobernador, es el nuevo dueño del PAN en Veracruz.
Bajo el manto protector de Los Pinos, Yunes está convirtiendo al partido blanquiazul en uno de sus negocios más rentables del futuro.
Para el 2012 el PAN de Veracruz será importante y jugosa agencia de colocaciones políticas para familiares, amigos y compadres del yunismo.
Yunes también sabe su juego…
Perdiendo la gubernatura, ganará el PAN veracruzano del 2012.
Es decir…
Loco, pero no pendejo.
¿O usted qué opina?

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